Aprende tú y enseña a tu familia.
De haber sabido “cómo moverte” cuando eras más pequeño/a, habrían mejorado tus condiciones físicas, pero también las cognitivas y las lingüísticas(por la interconexión del sistema nervioso con múltiples sistemas y capacidades)
No podemos cambiar el pasado, pero sí el presente y mejorar el futuro.
Tu conocimiento sobre pedagogía corporal implica una mejora para ti y para los que te rodean. Piensa en tus hijos.
Si mejoras tu movilidad mejorarás tu calidad de vida, pero también serás un referente para tus hijos.
Incluso puedes considerarlo como una actividad a desarrollar en común…por tanto ganamos todos, si mejoras tú mejoramos todos.